Home -- Spanish-ES – Perform a PLAY -- 039 (Stoning and crowning)
39. Pedrada y corona
El quinto curso había entrenado mucho y esperaba impaciente el campeonato juvenil. Cada uno dio lo mejor de sí en el campeonato.
Llegó el final y la entrega de medallas. ¡Qué radiantes las caras al recibirlas! Alberto era un corredor extraordinario y la medalla de oro coronó su esfuerzo.
Imagínate que hubiera comenzado bien la carrera, que hubiera estado en primera posición, pero que pocos metros antes de la llegada hubiera desistido y perdido la carrera. Inimaginable. Quien comienza una carrera tiene que correr bien y terminarla si quiere ganar.
Eso también vale para alguien que vive con Jesús. Comenzar a creer en Jesús es importante, pero después todo depende de cómo seguimos y perseveramos. Jesús nos ayuda en eso. Lo vi en la historia de Esteban.
Había gente que quería hacerle dejar su fe, así nos lo cuenta la Biblia. Por eso empezaron una disputa con él. Pero Esteban no entró en la pelea. Eso los enfureció todavía más. Por todas partes divulgaron mentiras feas sobre él. Hasta lo llevaron a un tribunal de justicia.
Acusador: "Esteban ofendió a Dios, dijo cosas que van contra la ley."
Juez: "¿Son ciertas las acusaciones contra ti?"
Todos los ojos se fijaron en Esteban. Su cara brillaba como la de un ángel. En vez de defenderse empezó a hablar de Jesús.
Esteban: "El Hijo de Dios vino a este mundo. Vosotros lo crucificasteis. Pero Dios lo resucitó."
Aún frente a los tribunales Esteban se mantuvo fiel a su Señor. Después miró al cielo y dijo:
Esteban: "Veo el cielo abierto y a Jesús de pie a la derecha de Dios."
Al oír esas palabras la multitud furiosa se abalanzó sobre él. Le pegaron, lo arrastraron afuera de la ciudad y lo apedrearon. Pero Esteban soportó todo y se mantuvo fiel a Jesús. Lo apedrearon hasta matarlo. Antes de morir oró:
Esteban: "Señor Jesús, déjame ir al cielo para estar contigo y perdónales su culpa."
Para Esteban el camino a la meta fue difícil. Pero se mantuvo firme. Por eso Jesús le dio la corona de honor. Vale la pena soportar dificultades por creer en Jesús. Porque la burla, el odio y el desprecio no son el final. Lo más hermoso está por venir.
Personajes: Relator, acusador, juez, Esteban
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