Home -- Spanish-AM – Perform a PLAY -- 003 (Pig food or banquet food)
3. Miseria o fiesta
El padre estaba parado frente a la ventana, con su rostro marcado por la tristeza. Hacía pocos días que su hijo menor lo había abandonado. Le pidió el dinero que le correspondía de la herencia familiar y se fue. Salió del pueblo sin volver la mirada hacia atrás ni una sola vez. Simplemente se fue.
El padre amaba a su hijo. Todos los días se preguntaba: ¿Dónde estará? ¿Cómo le irá? Esperaba que en cualquier momento apareciera en su casa nuevamente.
Mientras tanto el hijo gastaba todo el dinero en fiestas y con amigos. Mucho dinero - muchos amigos. De una fiesta a la otra. Tomar, comer, reír, divertirse... y hacer cosas, de las cuales sabía muy bien que no eran correctas. Simplemente se dejó llevar por los otros.
Pero muy pronto todo el dinero había desaparecido – y los amigos también. Se quedó solo.
Comenzó a buscar trabajo, pero no encontraba. Finalmente un granjero le dio un empleo. Lo puso a cuidar cerdos – era lo peor que le podía pasar. ¡Qué humillante!
El estómago le hacía ruido de tanta hambre y deseaba comer el alimento de los cerdos, pero estaba prohibido. Hambriento y sucio, sentado junto al chiquero maloliente comenzó a reflexionar.
Su padre lo amaba, lo había mostrado en mil oportunidades. ¿Pensaría en eso? Parece que si, porque de repente se levantó y tomó una decisión, dijo:
Hijo: "Voy a volver a casa y le diré a mi papá que he pecado y que estoy muy arrepentido por haber hecho tantas cosas malas, por haber seguido mis propios caminos."
De verás, estaba dispuesto a reconocerlo.
Imagínate lo que sucedió: Cuando el hijo todavía estaba lejos de la casa de su padre, éste ya lo vio. Lo amaba tanto que corrió a su encuentro.
Antes que el hijo pudiera pronunciar palabras el padre lo abrazó y besó a su sucio, maloliente y andrajoso hijo. Más que feliz llamó a sus empleados:
Padre: "Rápido, traigan para mi hijo la mejor ropa, un anillo y zapatos. Preparen un banquete, vamos a festejar. Mi hijo estaba muerto. Estaba perdido. Pero volvió a casa y está de nuevo conmigo."
Tanto como este padre amaba a su hijo, tanto ama Dios a ti y a mí. Él quiere que nos acerquemos a Él y vivamos con Él. Por eso Jesús contó esta historia.
¿Quieres saber más del amor de Dios y cómo uno puede acercarse a Él? ¡Escríbeme!
Personajes: Relator, hijo, padre
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