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Home -- Spanish-AMPerform a PLAY -- 081 (Man overboard 1)

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PIEZAS DE TEATRO -- ¡represéntalas para otros niños!
Piezas de Teatro representaciones para niños

81. Hombre al agua 1


Ven, ¡hagamos una gira por la ciudad!

Niño: "Impresionante, mira cómo está fortificada. Iré a ver las atalayas."

Niña: "Yo mejor voy a la biblioteca. Podría estar horas hojeando los viejos libros."

Niño: "El palacio real. Hombre, ¡qué lujo!"

Niña: "Yo voy al zoológico."

Niño: "¿Quieres visitar a tus parientes allá adentro?" (risa)

Muchos años atrás Dios observaba esa ciudad. No se dejó impresionar por las fachadas hermosas. Veía detrás de ellas mucho odio, peleas, engaños y homicidios. Los hombres de esa ciudad vivían como si no existieran ni Dios, ni sus mandamientos. Se habían olvidado de su creador. Eso es lo peor que le puede suceder a los hombres.

Si Dios hoy observe tu vida, ¿qué verá? Él tiene que castigar el pecado, porque es santo. Pero Dios también es amor y le gusta mucho más salvar que castigar, por eso advierte.

Dios dijo: "Jonás, vete a la mundialmente famosa ciudad Nínive. Anúnciales mi castigo. Pues la gente allá se olvidó de mí."

Jonás se fue – pero no fue a Nínive.

(correr, respiración agitada)

Jonás: "Jamás iré a Nínive. ¿A los enemigos de nuestro país? No estoy loco. Que venga el castigo de Dios, que se mueran, se lo merecen. Ahí en el puerto hay un barco. Les pagaré bien, para que me lleven bien lejos."

Pero resulta caro huir de Dios.

Jonás trepó a la bodega del barco y agotado como estaba se durmió entre cajas y tambores. Había hecho algo muy tonto. ¿Se puede huir de Dios? Aunque corriéramos hasta el fin del mundo, Dios nos podría ver sin dificultad. Dios veía a Jonás.

De repente estalló un hurracán. La tripulación clamó a sus dioses. Al Dios viviente, quien desea salvar, no lo conocían. Echaron la carga al agua. Pero no servía de nada, el barco se movía como una hoja de papel, podía hundirse en cualquier momento.

El capitán agarró a Jonás y lo sacudió.

Capitán: "¡Hey, despierta! Clama a tu Dios, tal vez nos pueda salvar."

Jonás se despabiló de golpe. Y luego todo salió a la luz.

Marinero: "¿Quién eres en realidad? ¿Y de dónde vienes? ¿Cuál es tu ocupación?"

Jonás: "Soy Jonás. Adoro al único Dios, creador del cielo y de la tierra. Yo tengo la culpa de esta desgracia, porque he desobedecido a Dios."

Marinero: "¿Y qué haremos ahora?"

Jonás: "Échenme al mar, van a ver que se tranquilizará y Dios los salvará."

Al comienzo no querían, pero después tomaron a Jonás y lo tiraron al agua. (chapoteo)

¿Era el final? No, la aventura recién comenzaba.

La historia continúe la próxima vez.


Personajes: Relator, niño, niña, Dios, Jonás, capitán, marinero

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